viernes, 25 de febrero de 2011

LA CARRERA OFICIAL


          El 2 de febrero de 1938, a las ocho de la noche, se reunieron los representantes de las hermandades jerezanas, bajo la presidencia del reverendo padre Corona Humanes, en el salón del archivo de la iglesia parroquial del Apóstol Santiago para constituir la Junta Ejecutiva de la Unión de Hermandades. Uno de los principales acuerdos tomados fue el de nombrar presidentes honorarios al Cabildo Colegial y al Ayuntamiento de la ciudad. A este último se le pidió que participara en la organización de la Semana Santa.
El Consejo Ejecutivo acordó "establecer una Carrera Oficial para las distintas cofradías en su estación penitencial anual, solicitar del Excelentísimo Ayuntamiento la instalación de la mesa de comprobación de llegada y de una tribuna presidencial para las autoridades, aparte de las tribunas para el público y una subvención digna de la importancia de la Semana Santa jerezana". La Comisión Permanente del Ayuntamiento, en sesión de 29 de marzo de 1938 aprobó una subvención que debería, en lo sucesivo ser prorrateada entre todas las hermandades.
Aquel año, 1938, nació la Carrera Oficial de las cofradías jerezanas, una iniciativa a imitación de lo que ya se venía haciendo en Sevilla, para una mejor coordinación de los itinerarios y horarios de las procesiones, y, en especial, para que el público jerezano; tuviera la oportunidad de contemplar a las cofradías en un mismo lugar y más cómodamente. Un servicio a la ciudad que las hermandades no necesitaban para cumplir con su testimonio de fe y su estación penitencial en la entonces iglesia Colegial, pero que beneficiaba a todos, tanto a los cofrades como a la ciudad.
En estos cincuenta y nueve años la Carrera Oficial ha sido la misma con algunas puntuales modificaciones. Pero, sin embargo, han sido los últimos años cuando nuestra Carrera Oficial ha sufrido más cambios, motivados, principalmente, por la demanda popular en disponer de palcos y sillas para los días de Semana Santa.
           Llama ahora la atención que se politice poniendo trabas a esa demanda popular, cuando no es sólo a las hermandades a quienes interesa la ampliación de palcos y sillas por cuanto reporta económicamente sino también a nivel popular por la enorme demanda existente. Interesa a las hermandades porque sin cofradías en la calle no habría Semana Santa y montar una Semana Santa como la montan los cofrades de Jerez con mano de obra gratuita, quitando tiempo de su ocio y de su familia, aportando hasta economía para hacer posible ese milagro de arte y de religiosidad, cuesta mucho dinero.
¿Qué pasaría si, como ocurre con otras fiestas, la Semana Santa, tuviera que montarla el Ayuntamiento? ¿Cuánto costaría montar tantos pasos de palio? ¿A cuánto habría que pagar la hora? ¿Cuánto habría que abonar hoy en día, no sólo a las cuadrillas, sino también a un buen número de personas que colaboran altruistamente? ¿Cuánto costaría el duro trabajo de una junta de gobierno? ¿Y el de un Consejo de la Unión de Hermandades, que organiza para las cofradías, y también para Jerez, toda la coordinación de horarios e itinerarios?¿Y asumir los costos de cientos de cirios, cera, flores, acólitos, bandas de música, etc?
Y todo ello sin mencionar el mantenimiento de templos de gran valor artístico, piezas de museo, y las loables y desconocidas bolsas de caridad en donde las cofradías ya realizan una importantísima labor social
Y todo eso sale ahora del trabajo desinteresado de los cofrades y en parte de la recaudación de palcos y sillas que ayuda no sólo a compensar los numerosos gastos sino también a engrandecer en todos los aspectos, nuestra Semana Mayor. Por ello llama aún más la atención que desde el Ayuntamiento se quieran desviar los fondos de quienes lo generan, porque, desgraciadamente, sin fondos no hay cofradías y sin cofradías no hay Semana Santa.
No nos carguemos esa gallina de los huevos de oro que deja tantos beneficios para la ciudad, porque ni la historia ni el pueblo nos lo perdonarán nunca.
(Artículo publicado en Información Jerez el  13 de enero de 2007. Definitivamente los palcos han comenzado a montarse, configurando, un año más, la Carrera Oficial de la Semana Santa jerezana)


Eduardo Pereiras captó, en el año 1941, esta instantánea del paso de la Hermandad de las Tres Caidas por una incipiente Carrera Oficial



jueves, 24 de febrero de 2011

JEREZ EN TENERIFE

     
      Gran parte del corazón de Jerez estará mañana en Tenerife, es mucho lo que se juega no solo en el campo canario sino también para la ciudad jerezana.

      Jerez estará mañana muy presente en el archipiélago, intentará con su imparable equipo conquistar las islas Canarias, con la misma hidalguía de aquel Pedro de Vera, hijo de D. García de Vera y de Dña. Aldonza de Vargas, que nació en el primer tercio del siglo XV. Fue Caballero Veinticuatro de Jerez y desempeñó otros cargos importantes, destacando principalmente por el valor con el manejó la espada en las batallas de la reconquista y por la lealtad que demostró siempre hacia la persona del monarca. En las expediciones a tierras de moros y toma de poblaciones en que intervino, resplandeció siempre su arrojo inigualable. Los Reyes Católicos, enterados de sus cualidades , le confiaron en 1483 la continuación de la conquista de las islas Canarias, así como el gobierno de las mismas. En tres años se apoderó de la isla de Gran Canaria y la dejó completamente asegurada. Después fue nombrado proveedor general de las tropas reales. Murió en Jerez en 1496, siendo sepultado en el convento de Santo Domingo. 
   
      Nuestro Pedro de Vera conquistó Canarias hace ya mucho años y en Santo Domingo reposa con la satisfacción de ser un conquistador de primera división. Los tinerfeños le temen a estos herederos de Pedro de Vera, aunque saben que la conquista de los peninsulares nada tendrá que ver con aquella de los castellanos del siglo XV, que supuso la destrucción del anterior mundo aborigen, la muerte, las enfermedades, la esclavitud, las deportaciones y la adaptación a una nueva sociedad que provocó una disminución considerable de la población autóctona. Ahora tanto Jerez como Tenerife juegan a triunfadores, Jerez con su nominación de gran ciudad y todo su despegue en el ámbito turístico y promocional, y Tenerife por sus condiciones climáticas, con su sol y su acceso al mar que han convertido a Tenerife y a buena parte del archipiélago en una potencia turística internacional, ya que solamente en esta isla se recibe anualmente cifras superiores a los 2 millones de visitantes.
    
       En Tenerife Jerez mañana puede ser una fiesta por el ascenso de su equipo. Allí se puede fundir los caldos jerezanos con los de Icod de los vinos, los límites del Puerto de la Cruz con el del Puerto de Santa María, el parque de la Orotava con el Hontoria, la playa de San Juan con las de San Telmo, la Cañada del Tedie con la Cañada Ancha, los fervores candelarios tinerfeños con los de la Plata,  Guarachico con el Agrimensor y el Tempul con el Loro Parque.
     
      La fiesta está servida entre Tenerife y Jerez, se acabaron las luchas para disfrutar de un merecido ascenso y que mejor que en Tenerife donde tantos turistas se desplazan para disfrutar de su clima y de su sol.
    
      Los  Reyes Católicos tenían razón las islas Canarias había que conquistarlas, porque eran islas afortunadas, porque antes que se la llevaran otros nos las quedábamos nosotros, para eso mandó a Pedro de Vera, porque sabían que era imparable y que ante él todos los objetivos se conseguían, por eso conquistó Canarias y por eso descansa en Jerez, como ejemplo histórico de lograr objetivos con el tesón y la hidalguía del que sabe lo quiere.
      
      Los jerezanos conquistarán mañana Tenerife, pero no con las fuerzas de las armas, ni arrebatando y destruyendo lo autóctono, sino conquistando la gloria al sentirse ambos, tanto Jerez como Tenerife unos triunfadores que han sabido llegar a lo alto con la fuerza de su entrega al deporte y su batalla por la conquista del corazón de sus respectivas aficiones.
     
      Jerez, que durante muchos años también ha sido una isla para muchas administraciones, mañana, si por fin se consigue el ascenso a primera, puede también gozar del apelativo de afortunada
      
        (Artículo publicado en Información Jerez el 6 de junio de 2009. Mañana viernes de nuevo los jerezanos nos enfrentaremos a los canarios, no con las armas sino a través del deporte)

El jerezano Pedro de Vera, conquistador de Canarias

  

miércoles, 23 de febrero de 2011

COLEGIOS DESCONCERTADOS Y SUS LISTAS


            Es tiempo de listas de ingresos escolares. En estos días han sido muchos los padres que viven con preocupación la escolarización de sus hijos, no por falta de plazas sino por falta de plazas en el colegio elegido. Por ello produce desconcertación que en un país que tanto interés se pone por quitar los símbolos religiosos de los colegios, que tanto se aboga por excluir la asignatura de religión, que tanto se lucha por una educación laica y que tanto se presume de la misma calidad de enseñanza en centros estatales y concertados, sean precisamente los colegios católicos los que más demanda tengan de plazas escolares, que sean los centros con principios religiosos los que prefieren mayoritariamente los padres para la educación de sus hijos, según los datos reales emitidos por los organismos competentes.
Todo esto, como menos, desconcierta, porque no se puede optar por favorecer desde el Estado una educación laica cuando la mayor demanda de plazas escolares se encuentra en centros religiosos, cuando son los propios padres los que están solicitando, con su gran demanda, o que se amplíen o que haya más colegios religiosos. Lo que está siendo para muchas familias un auténtico drama es el tener que mandar a sus hijos a un colegio que no desean.
Y esto desconcierta también a los propios educadores que, por un lado, se le marcan unas pautas dentro del llamado Estado aconfesional que nos encontramos y, por otro, se ven llamados a atender esa opción preferencial por una educación en los principios cristianos.
En Jerez los colegios religiosos siempre han gozado de gran fama v prestigio, por la educación en valores que se ha ofrecido y de lo cual se honran muchos jerezanos. Congregaciones como los marianistas presentes en Jerez, desde 1888,  los hermanos de La Salle que en este año cumplen 125 años de su llegada a esta ciudad, o los salesianos, establecidos entre nosotros con la fundación en 1946 del Oratorio Festivo, gracias a la labor del recordado padre Torres Silva y al insigne jerezano don Álvaro Domecq, han sido semilleros de formación para muchos jerezanos. Otros regidos por religiosas como el Beaterio, fundado por madre María Antonia de Jesús Tirado en 1800, las Hijas de Ntra. Sra. del Sagrado Corazón que vinieron a Jerez en 1970, las religiosas de la Compañía de María, cuyo actual colegio lleva abierto desde 1889, las  esclavas que vienen impartiendo clases en nuestra ciudad desde 1883, las religiosas de Jesús María que abrieron casa y colegio en el Cuco en 1948 y en la Asunción en 1960, las josefinas que llegaron en 1951, la de los Sagrados Corazones desde 1973 en Picadueñas, las oblatas presentes en esta tierra desde 189l,las Hijas de la Caridad con su labor docente, desde 1897, en el colegio det Salvador y, años más tarde, en las escuelas de Madre de Dios, o las salesianas que en 1897 fundaron el colegio de Pedro Alonso, hoy en Monte Alto, y en 1912 el de la calle Cabeza, son un referente educativo en toda la ciudad. Y sin olvidar aquellos otros colegios que desaparecieron, pero de grato recuerdo aún, como el de las carmelitas de la plaza de San Marcos , que funcionó desde 1905 hasta 1970, el de las Hermanas del Santo Ángel abierto en Jerez en 1875 y clausurado en 1978, o las religiosas del Servicio Doméstico que ejercieron su labor docente en Bertemati desde 1942 hasta hace escasas fechas, aunque desde 1887 estaban en Jerez.
Tanta historia y tradición educativa no se puede borrar ni por falsos conceptos de laicismo ni por decreto ley. Por eso hoy siguen los jerezanos demandando la misma educación para sus hijos que recibieron de sus mayores una educación en los valores cristianos que han sido la gran base de toda la cultura de Occidente. Hoy quizás se sepa más, pero, como diría Cicerón, una cosa es saber y otra enseñar, y para enseñar hay que educar lo dejó dicho Pitágoras: "Educa a un niño y no será necesario castigar a un hombre". La educación no puede crear desconcierto y, por eso, siguen faltando plazas.
(Artículo publicado en Información Jerez el 5 de mayo de 2007. La semana próxima comienza un nuevo proceso de escolarización)

Fotografía de otros tiempos. Primeras Comuniones del colegio de las Josefinas en la iglesia de Santa Ana de Jerez



Grupo de alumnas de El Cuco en una foto del pasado



Desaparecido colegio de las Carmelitas que estuvo ubicado frente a la iglesia de San Marcos



martes, 22 de febrero de 2011

EL ÚLTIMO TERREMOTO


             El 1 de noviembre de 1.755, tuvo lugar el último de los grandes terremotos sufridos en la Península Ibérica. Aquella mañana, Lisboa se derrumbó como consecuencia del movimiento sísmico, teniendo que ser reconstruida, casi al completo, por el marqués de Pombal, uno de los grandes estadistas de la nación portuguesa.
El terremoto de Lisboa  es el más notable de la historia.  Se produjeron dos sacudidas violentas poco antes de las 10 de la mañana y otra alrededor del mediodía. El aire se impregnó de polvo procedente de cuantos edificios quedaron destruidos y se originaron numerosos incendios. Poco después de las dos primeras sacudidas, el mar se retiró de la costa y regresó con enorme ímpetu en tres grandes olas de 5 a7 metros de altura, lo que completó la destrucción de la ciudad y produjo la muerte de muchas personas. Las olas del mar, en movimiento centrífugo, bañaron las costas del norte de Africa, de Europa occidental, de las islas del Atlántico y de las Antillas. Se produjeron variaciones en el nivel del agua de lagos de Inglaterra e incluso de Finlandia a una distancia de 3.540 km. de Lisboa. Causó una impresión profunda en el mundo civilizado y fue considerado como un castigo divino.
Los efectos de este temblor aIcanzaron nuestras costas más cercanas; en Cádiz, se destruyen 16 naves, el agua inundó parte del barrio de la Viña y dejó aislada a Ia ciudad aI cortar el camino con la Isla de León, causando, igualmente, numerosos fallecimientos. Chipiona quedó parcialmente inundada cundiendo el pánico por toda la ciudad; viéndose afectados numerosos edificios en toda la provincia.
Jerez, fue víctima también de aquel fenómeno natural tan poderoso como terrible. Una de las iglesias más dañadas por este terrible suceso fue la de San Mateo, las bóvedas de la nave quedaron agrietadas y el campanario destruido. Santiago y otros templos cercanos también se resintieron del terremoto y toda la ciudad quedó sorprendida y asustada por la fuerza de la sacudida.
El pasado lunes padecimos el último terremoto con epicentro en el suroeste del cabo de San Vicente, en Portugal, un terremoto que se sintió en una buena parte de España, con dos réplicas que según explicaron los expertos "entran dentro de la normalidad en este tipo de sucesos", aclarando que "cuando hay pequeños seísmos es buena señal, porque se alivian las tensiones dé la falla poco a poco, así el movimiento es poco a poco y no de golpe". A pesar de todo, el terremoto de 6,1 grados de magnitud que se sintió el pasado lunes, provocó en Sevilla el desalojo de varios edificios públicos y la suspensión de juicios en la Audiencia Provincial.
La naturaleza a veces pasa factura, por ello es necesario que desde todos los estamentos se vuelquen los esfuerzos para prevenir cualquier tipo de fenómenos de esta índole, para que la sociedad se sienta segura ante fenómenos naturales de tal magnitud, para que los expertos e investigadores, geólogos de todo el mundo, encuentren el apoyo necesario para prevenir, en la medida de lo posible, estas catástrofes que , peligrosamente, cada vez vemos con más asiduidad, especialmente en zonas tropicales.
La zona atlántica frente al cabo de San Vicente, suroeste de Portugal, es una de las de mayor actividad sísmica del planeta, por ello debe ser centro de prevención del mundo entero, especialmente de los paises limítrofes. Ias naciones no tienen por qué vivir sobresaltadas ante fenómenos de esta naturaleza que son los que verdaderamente perjudican a la humanidad; los gobiernos tienen la obligación de velar por la seguridad y la sociedad de exigirlo. De nada sirve perderse entre leyes abortivas en  Portugal o campañas electorales en España, si la sociedad en general no le presta la debida atención a los peligros naturales. De la catástrofe del terremoto de Lisboa tuvo culpa la propia naturaleza, de la de los terremotos de hoy quizás no podamos decir lo mismo.
(Artículo publicado en Información Jerez el 17 de febrero de 2007. En este mes de febrero de 2011 un nuevo terremoto ha azotado el mundo en este caso causando 65 muertos en Nueva Zelanda).

Aspecto del interior del templo de San Mateo a mediados del pasado siglo XX. Esta iglesia fue una de las más afectadas en Jerez  por el terremoto de Lisboa de 1755



lunes, 21 de febrero de 2011

UNA DE CAMPANARIO


            La palabra "campanario" está de actualidad debido a la popularidad de la esposa del diestro de Ubrique que, desde que se vino a vivir a Jerez, parece haber aumentado, aún más, su fama.
Hasta ahora los únicos campanarios que tenían fama en Jerez eran los que se ubicaban en las torres y espadañas de nuestras iglesias y capillas. El de la torre de San Miguel, aquel que ya cantara Lola Flores y evocara el recordado poeta Julián Pemartín como el "del llanto de la doble campanada" en referencia a nuestra insustituible Madrugada Santa, aquel campanario que fuese reconstruido tras el terremoto de Lisboa de 1755 y que señala al cielo diciendo: "aquí está Jerez". El de Santiago con sus azulejos gitanos y su veleta del santo jacobeo. El de la torre de San Juan de los Caballeros, con su característico cupulín, que cobró popularidad por la famosa caída del rayo. El de la torre de la Victoria, construida entre 1636 y 1642 por Antón Martín Calafate, emblema de cuatro jerezanísimas calles. El del Carmen, que quedó solo al no construirse su hermano gemelo y que hoy se vuelve loco cada 16 de julio en honor de la Reina del Carmelo. Los campanarios regionalistas de las Reparadoras que permanecen mudos para no enturbiar el silencio eucarístico de su templo. La hoy desaparecida torre<ampanario de la Merced y por último la principal torre-campanario de Jerez, la de nuestra Catedral, la que mañana hará revolotear sus campanas en honor y gloria a Jesús Sacramentado.
Pero existen otros campanarios en Jerez que en fama y popularidad nada tiene que envidiar a las torres mencionadas y menos aún a la señora de Jesulín, son los ubicados en espadañas; aquellas que€ coronan nuestro pueblo como símbolo de su religiosidad. Espadañas que inundan el cielo jerezano desde La Plata a La Vid. Santiago, con su espadaña del reloj; San Marcos, con su hermoso campanario de Juan de Vargas; San Lucas con su doble campanario, uno sobre la fachada y otro más pequeño encima de la sacristía; San Dionisio con una espadaña-campanario culminando la histórica torre de la Atalaya y otra, también, sobre la sacristía; la de San Mateo, estampa eterna de la plaza del Mercado, Santo Domingo con su peculiar y típica espadaña del reloj con sus tres campanitas al vuelo y su otra espadaña de tres campanas oculta entre tanto emporio de arte; San Francisco con su espadaña inmaculada, San Pedro de populares campanas con su sonido castizo de un barrio decimonónico y señero. Sin olvidar los campanarios monásticos de esos conventos de clausura que llenan de espiritualidad nuestro viejo Jerez o esos otros pequeños campanarios que desde capillas y ermitas nos recuerdan, de vez en cuando, que las campanas son el mejor programa del corazón porque sus sonidos son la llamada más clásica al sentimiento, a las añoranzas, a las vivencias de un Jerez de antaño y a la verdad de un medio de comunicación unido al corazón jerezano, tan puro como ese aire que acoge sus sonidos y que se resiste a la contaminación de los nuevos tiempos.
Los campanarios de Jerez han sido la referencia de nuestro caminar entre históricas callejas llenas de sabor, los sonidos de merienda entre visillos de encajes y cierros de cristales, la algarabía de mañanas eucarísticas o tardes de novenas carmelitas, volteos en tardes de fiestas y sonidos apesadumbrados en citas luctuosas.
Los sonidos de campana han sido hasta llamadas escolares para formar filas tras el recreo y alegrías, con la boca llena de uvas, cada noche de fin de año.
Campanarios históricos y modernos, religiosos y civiles, grandes y pequeños, pero sobre todo campanarios de siempre porque forman parte sonora de la vida y la historia de cada uno, campanas que nos llamaron, a afrontar muchos momentos que jamás olvidaremos. En este país de tanto ruido y chabacanería, ojalá hablen más los campanarios y menos de "la Campanario". El gozo del espíritu nos lo agradecerá.
(Artículo publicado en Información Jerez el 17 de junio de 2006. Cerca de cinco años después "La Campanario" sigue estado de actualidad)
Desaparecido campanario del templo de la Merced. En la foto superior el campanario de los Hurones


domingo, 20 de febrero de 2011

REMEMORANDO A CHACÓN


       Antonio Chacón nació en Jerez de la Frontera el 16 de mayo del año 1869, falleció en Madrid en 1929. Investigaciones de José Blas Vega indican que Chacón es de padres desconocidos, siendo adoptado por Antonio Chacón Rodriguez y a su esposa María Garcia Sánchez, vecinos de la calle Sol nº 60, que los reconocieron como hijo y le dieron sus apellidos.
     
      En este año de 2011 se cumplen el 125 aniversario de aquel 1886 que resultó un año clave en la vida de Chacón (según narra Javier Molina en sus Memorias). En el 26 de Julio de ese año, celebró su triunfo en la corrida de toros del día anterior en la Plaza de Toros de Jerez, el diestro Manuel Hermosilla, en la Tienda La Rondeña, con una fiesta que duró toda la noche y en la que cantaron El Mellizo y Joaquín La Serna, causando el joven cantaor la admiración de todos. Era una época de grandes figuras del cante y había mucha competencia entre ellos, al mismo tiempo que respeto por la sabiduría de los demás. Chacón cantó en Tablaos y Teatro, Plaza de Toros y Verbenas, codeándose con los mejores de la época, el maestro Patiño, Enrique El Mellizo, su hermano Mangoli, Enrique Ortega El Gordo, en Cádiz fue donde al no atreverse a cantar Seguiriya, según dijo por no quedar mal delante de tantos maestros, fue que cantó por Malagueñas, a partir de ese día se entabló una competencia a ver quién hacía mejor ese cante con Enrique El Mellizo, detalle que fue famoso y motivo de muchos contratos.
   
      En el otoño de 1886, Silverio le contrata para actuar en su café cantante sevillano, cobrando veinte pesetas de sueldo, algo que ningún cantaor había cobrado en Sevilla, según Fernando el de Triana, que dijo que ningún cantaor de la época prescindieron de sus derechos de antigüedad y acordaban cantar por delante de Chacón para ser escuchados e indiscutiblemente aplaudidos, pues al terminar Chacón la primera sesión quedaba el salón vacío, hasta que no empezaba la segunda sesión. Ocho meses seguidos cantó Chacón en el Café de Silverio. Después de cantar en Málaga, vuelve a Sevilla para hacerlo en el Café del Burrero, durante sesenta días, con tal éxito que Silverio tiene que cantar en su café pese a estar retirado, para salvar a la clientela.
   
       "A ti te dirán un día el Papa del cante...". Esas fueron las palabras de Enrique el Mellizo a Antonio Chacón después de oírle cantar por primera vez. Y la premonición del genio gaditano se cumplió plenamente. Tomás Borrás, en un conocido poema dedicado a Chacón muchos años después, certificaba la corazonada de El Mellizo:  "Los espejos humanos son flamencos y cantan Don Antonio les paga —como a él— por oírlos. Don Antonio Chacón, que es el Papa del cante, va a celebrar con ellos, sacerdotes del rito...."
   
      La posición que llegó a ocupar Chacón en la sociedad de su tiempo se debió tanto a sus excelencias artísticas como a sus condiciones personales, caracterizadas por su señorío y honradez. Por ello era objeto de un gran respeto y recibía el trato de don Antonio.
    
      Don Antonio Chacón murió en Madrid el 21 de enero de 1929, pocos meses después el Ayuntamiento de Jerez acordó colocar una lápida en la fachada de la casa donde se crió, en la calle Cazón, rotulando con su nombre a dicha vía. se tardó diecisiete años en cumplirse el acuerdo Más recientemente se colocó un busto de este insigne artista jerezano en la calle San Agustín, busto, que tras la última remodelación de esta zona permanece en los almacenes municipales a la espera de su reposición.
     
      Conmemorando este 125 aniversario de aquel año crucial en la trayectoria flamenca de don Antonio Chacón es el momento de recuperar la memoria de este artista universal que tanto gloria ha dado al flamenco y a la universalidad de esta tierra. Jerez no puede mantener más tiempo en el olvido aquel genio del que dijo Manuel Siurot:
   
       "El cante de don Antonio era como néctar generoso, catedral gótica. Meca de todos los que han cerrado los ojos delante de una guitarra. Ideal de todos los idealistas y cumbre de un arte inmortal." 

       (Artículo publicado en Información Jerez ayer sábado 19 de febrero de 2011. En la foto superior el busto de don Antonio Chacón que figura en la peña de su nombre en una instantánea realizada por el destacado investigador local José Luis Jiménez,)



Placa instalada en la calle Cazón en memoria de don Antonio Chacón

Retrato del genial cantaor flamenco don Antonio Chacón García






sábado, 19 de febrero de 2011

NO ME LLAMES EXTRANJERO

   
     DEDICADO A LOS COSTALEROS DE LA HERMANDAD DE LORETO QUE EL PRÓXIMO LUNES COMIENZAN SUS ENSAYOS DE CARA A UNA NUEVA SEMANA SANTA.

     Nuestras Casas de Hermandad se llenan estos días de hermanos sacando sus papeletas de sitio, recogiendo su anhelada túnica nazarena, o de costaleros soñando con una nueva salida procesional. Tiempo de reencuentros, de ilusiones, de ganas de Semana Santa. 
 
      Desde el pasado año los hermanos de Loreto tenemos la suerte de contar en nuestras filas nazarenas con un grupo de hermanos bolivianos, nazarenos extranjeros de nacimiento pero lauretanos de corazón. Este año, además, uno de estos hermanos venidos de aquellas tierras tan unidas a nosotros por historia, lengua y creencias, vivirá la experiencia de ser costalero de Loreto, paseando a la Soledad de María por las calles de Jerez.
    
     Las vocaciones religiosas están recibiendo un revulsivo desde tierras extranjeras, lo vemos en las comunidades de clausura, y lo vemos también, gracias al noble gesto de la adopción de niños, en la presencia de pequeños de otros países formando parte del grupo de monaguillos o como nazarenitos. Y lo veremos, en mi Hermandad de Loreto y quizás en otras más, jóvenes y mayores venidos desde otras tierras, integrados plenamente como nazarenos o costaleros.
    
     Tengo que confesar que cuando estos hermanos nuestros mostraron su interés por formar parte del cortejo procesional nos surgió la duda si sabrían entender todo este fenómeno tan peculiar y tan nuestro, pero solo hizo falta una breve conversación para darnos cuenta no solo de que hablamos un mismo lenguaje, el de la fe en Dios, sino que en algunos casos hasta nos superan en sus principios cristianos y en su compromiso con el Evangelio.
   
       Por eso el pasado lunes viendo a mi hermano venido desde América, escuchando las explicaciones del capataz y preparándose para vivir su primera experiencia como costalero de la Virgen de Loreto me acordé de tantos inmigrates que dejan atrás casa y familia y buscan entre nosotros un medio de vida y un gesto de acogida.
    
      Como el verso hecho canción, a estos hermanos "no le llamemos extranjeros porque son iguales nuestros rezos y el amor de la que sueña con el día del regreso". Por favor, no le llamemos extranjeros porque " del amor de una madre tuvimos la misma luz, en el canto y en el beso con que nos sueñen iguales, las madres contra sus pechos.
     (Artículo publicado en Información Jerez, en el recuadro "Cuaresmando", el jueves 19 de marzo de 2010  y en la AGENDA LAURETANA, Blog oficial de la Hermandad de Loreto, el martes siguiente)

Manuel Olmedo Corralero "El Papi" Primer capataz de costaleros del paso de Nuestra Señora de Loreto en su Soledad


viernes, 18 de febrero de 2011

LOS NIÑOS DEL ALCÁZAR


Uno de los grandes logros del patrimonio jerezano ha sido recuperar, en todo su esplendor, el recinto del Alcázar. A diferencia de otros edificios monumentales de la ciudad, el Alcázar de Jerez era hasta hace muy poco tiempo la gran asignatura pendiente del patrimonio local. No hace falta remontarse a varias décadas para record4r lo que era la muestra más palpable de la dejadez y el abandono. El Alcázar tuvo de todo, cine de verano, casas de vecinos, proyecto de hotel y de Ayuntamiento sobre horrenda estructura, etc. Todo menos lo que tenía que ser y lo que, afortunadamente, hoy es, tras su restauración, un magnifico conjunto monumental, sumamente atractivo para el turismo por su riqueza artística e histórica y un orgullo para la ciudad.
Si bello y evocador es su interior más impresionante resulta aún su aspecto externo con sus nobles portadas y recios torreones; todo ello rodeado por una Alameda Vieja de añoranzas jerezanas.
La Alameda Vieja fue el centro de esparcimiento estival de los jerezanos a mediados del pasado siglo XX. Un lugar para disfrutar del frescor que llegaba de la cercana bahía, allí se pasaban las noches de verano entre la algarabía de niños columpiándose en las Cunitas de Mariano mientras los padres degustaban exquisitos pajaritos fritos en los chiringuitos.
Para los niños de entonces ir a la Alameda Vieja en verano era todo un disfrute no sólo por las atracciones que allí se instalaban, sino, también, por cuantas posibilidades de juego ofrecía aquel amplio espacio siempre vigilado por las almenas del Alcázar. Se podía uno perder entre la maleza de unos jardines que, junto a la calle Manuel María González, ofrecían la posibilidad de creerse por unos instantes el Johnny Weissmuller jerezano para salir a la caza de unas ruidosas ranas que en la oscuridad de la noche daban cierto misterio a la lúgubre y escondida fuente central, o cobijarse en el templete de música, entonces situado en zona más frondosa, o simplemente jugar con los pocos mosaicos que iban quedando del enlosado del paseo central.
Los coches y las cercanías de las playas hicieron que los niños desaparecieran de la Alameda Vieja, ni siquiera para ver ilusionados unos Reyes Magos que, tras su largo viaje, descansaban en el Alcázar para salir desde allí, montados en sus carrozas, en la siempre inigualable jornada del 5 de enero.
La Alameda Vieja y su monumental Alcázar quedaron sin la alegría y el alboroto de aquellos niños que marcaron una época feliz de la historia jerezana, pero las circunstancias de la vida ha hecho posible que de nuevo un buen grupo de niños jerezanos se reúnan en la Alameda Vieja y más concretamente en el Alcázar son los niños del Jerez intramuros, los niños por los que no pasan el tiempo, ni las modas, niños que no entienden de ordenadores, de PlayStation, de tortugas Ninja o de increíbles Hulk destructores, quizás por ello mantienen ese candor y esa inocencia que les hace encantadores. Son, ellos, los niños que se exponen en el palacio de Villavicencio del Alcázar los que reivindican una inocencia que jamás se debería perder por intereses comerciales. Esos niños en sus silloncitos, en sus actitudes triunfantes o en sus deliciosos sueños son el reclamo más evidente ante una sociedad llena de tensiones.
La muestra de Niños Jesús del Alcázar es la mejor terapia de relax para los sentidos, ni las salas de masajes, ni los, tan de modas, baños terapéuticos, ni el mejor de los balnearios alcanzan a trasmitirnos tanta sensación de serenidad y sosiego como esos niños que, estos días, se hospedan en el Alcázar jerezano.
Hace falta de vez en cuando una exposición como ésta, por su arte, por su historia, por su belleza y porque ya era hora de que seamos nosotros, los mayores, los que nos acerquemos a los niños. Los niños del Alcázar están llenos de valores y de mensajes, las virtudes que allí se muestran tienen mucho que enseñarnos.
 ( Artículo publicado en Informaión Jerez el 17 de diciembre de 2005 con motivo de la interesante exposición de Niños Jesús celebrada en el Alcázar. En 1926 Salvador Díez compró el Alcázar, salvándolo de un derribo más que probable. Lo hizo tras conocer los planes del Ayuntamiento de derribar el recinto, argumentando su estado ruinoso para construir en su solar un parque público. Ayer el Ayuntamiento le rindió merecido homenaje rotulando una de las salas del palacio de Villavicencio con su nombre)


Muestra de algunas de las valiósas tallas de Niños Jesús que formaron parte de aquella exposición que tuvo lugar en el Alcázar jerezano.








jueves, 17 de febrero de 2011

REMEDIOS PARA UNA VIRGEN


En estos días se viene hablando de la incidencia de las palomas en distintos monumentos jerezanos. Las palomas embellecen nuestras plazas y ofrecen un trato directo imposible de entender en otras especies de aves, sin embargo, su fácil reproducción y su desenvolvimiento en el entorno urbano producen un efecto de erosión en edificios y en ornatos públicos de complicada solución.
Una pieza de gran valor escultórico que está padeciendo los efectos de estas aves, es la histórica imagen de la Virgen de los Remedios que preside la portada de la capilla de su nombre de la Puerta ReaL Esta interesante escultura está catalogada, por distintos historiadores y licenciados en Arte, como obra hispano borgoñesa del siglo XV. Es, por tanto, una valiosa talla medieval, labrada en piedra, de gran mérito y belleza, digna de su conservación y exposición en un museo, o bien de la ciudad o diocesano por ser Ia Iglesia su propietaria desde que, a finales del siglo XIX, tras su secularización por causa de la Revolución de 1868, fuese devuelta su capilla a las autoridades eclesiásticas, gracias a la eficaz gestión de Elena Gordon Lafuente.
Al incuestionable valor artístico de esta obra hay que añadirle su señalado origen histórico.
Cuentan las crónicas, que de muy antiguo existía en la Puerta Real, una pequeña capilla labrada en el mismo muro de La muralla en la que se veneraba una imagen de la Virgen con el Niño en brazos, invocada como de la Merced, y a la que los jerezanos se encomendaban al salir a batallas pidiéndole protección y amparo.
Y refiérese, que en el año 1325, en ocasión de que la morisca tenía puesta fuerte cerco a Jerez, se pide auxilio ante el inminente ataque, la ayuda no llegaba y los jerezanos deciden solos hacer frente, no sin antes dirigirse a la Virgen de la Puerta Real con la súplica: ¡Señora, remédianos! Dejando una reducida guarnición en las puertas y llevando consigo gran número de potros cerriles, toman el camino de Vejer para sorprender al enemigo por la espalda y liberar a la ciudad. No llevaba muchas horas de camino la comitiva jerezana cuando desde la atalaya de la ciudad se anuncia que llegaba a ella una fuerte tropa; eran los cordobeses que noticiosos del aprieto en que Jerez se encontraba, acudían a su socorro. Mientras tanto, la hueste jerezana que desconocía la llegada de los cordobeses, atan a las colas de los bravos potros unos cueros inflados y asombrando con gran estrépito de voces, trompetas y atabales rompieron el cerco musulmán, acometiendo entonces las tropas cordobeses y liberando a la ciudad.
Esta gloriosa acción se registra en la historia con el nombre de Batalla de los Cueros o de los Potros y desde entonces quedaron ambas ciudades hermanadas.
Como apunta el historiador Manuel Esteve, éste es también el origen de la advocación de la imagen titular y el motivo que fue causa de Ia edificación dé la capilla de Nuestra Señora de los Remedios, pues los jerezanos no dudaron nunca que a su intervención fue debida tan señalada liberación.
Motivo por el cual una de las mejores esculturas marianas que existen en Jerez, con tanta historia y veneración, no puede permanecer mas tiempo expuesta a las inclemencias meteorológicas y a los excrementos y otras suciedades de las aves de su entorno.
Una solución para su conservación, pasa por trasladarla de lugar y en su hornacina colocar una copia, tal como se hizo con el valioso relieve de alabastro de la Resurrección de Cristo que se encontraba en la fachada de la iglesia del Asilo de San José, una pieza gótica del siglo XV de la escuela de Nottingham, que hoy se expone perfectamente conservado en el Museo Arqueológico municipal.
La Virgen de los Remedios de la Puerta Real es una joya del Medievo, olvidada y no suficientemente valorada, que necesita de mayor atención por ser patrimonio de la historia y del arte jerezanos, antes de que el olvido la haga una Virgen irremediable.
(Artículo publicado en Información Jerez el 30 de junio de 2007. Recientemente en Sevilla ha salido una ordenanza municipal que recoge sancionar a aquellos que den comida a los animales en la calle, incluyendo a las palomas)



Curiosa fotografía del año 1968, donde podemos ver al Señor del Ecce-Homo que, con motivo de las obras que se estaban realizando en San Dionisio,, era trasladado en aquello años,, junto a la Virgen del Mayor Dolor, a la capilla de los Remedios para sus cultos curesmales




miércoles, 16 de febrero de 2011

CASCO ANTIGUO "IKEADO"


     La fiebre de Ikea llegó mucho antes a nuestra ciudad que la propia firma sueca de muebles, decoración y complementos para el hogar. Cada nueva construcción que se reedifica en el casco antiguo de la ciudad mantiene el estilo Ikea, formando una república independiente con respecto a cuantos edificios le rodean.
   
     La historia cuenta como después de seis décadas Ikea ha pasado de los bosques del sur de Suecia a constituir una gran realidad comercial.  El fundador de esta firma sueca cuando tenía cinco años, comenzó vendiendo cerillas a sus vecinos, y a los siete, amplió su zona de ventas montando en bicicletas. Se dio cuenta de que podía comprar cerillas al por mayor y a muy bajo precio en Estocolmo para después venderlas al por menor a precios también bajos pero obteniendo un buen beneficio. Pues algo por el estilo es lo que está pasando en el casco antiguo de nuestra ciudad, que se están comprando fincas en muy malas condiciones, muchas de ellas a bajo precio, para levantar unos edificios minimalistas, que por ponerle ventanas con sencillas rejas en vez de terrazas ya se supone que se respeta al entorno y todo ello con calidades muy simples para aminorar costos y para que en donde antes cabían dos familias ahora quepan treinta.
   
     Vemos portadas del siglo XVII y XVIII que sobrevivieron al derrumbe escoltada por ventanitas de rejas ikeadas, viviendas populares donde la cal y el pintoresquismo de sus patios tienen que competir con edificio independientes que rompen por completo la armonía constructiva de la calle. Casos concretos los podemos ver repartidos, principalmente, por el barrio de San Mateo y San Lucas. En la noble plaza de Ponce de León, junto al magnífico balcón esquinado, joya del renacimiento jerezano, la elegante fachada del colegio del Salvador y el compás del convento de Santa Rita acaban de levantar un paramento blanco con puerta discotequera, donde antes estuvo una casita con graciosos balcones siempre cuajados de flores y un abandonado local pero de cierta antugüedad. La calle Justicia está llena de ejemplos de este casco antiguo ikeado que estamos construyendo para vergüenza de generaciones venideras. El entramado de calles junto a Chancillería es otro exponente de este desprósito con la tradición y belleza estética de una collación que es un auténtico barrio de Santa Cruz jerezano, callejuelas que se vislumbran desde Francos o por el boquete de Porvera con cierto misterio y evocador guiño a nuestra historia, con rincones perdidos como aquel de la calle de la Carne con su azulejo de la Virgen del Amor y Sacrificio al fondo donde hoy se ve solo un desolador derribo entre arcos apuntados.
      
     Múltiples ejemplos inundan nuestro casco histórico de nuevos edificios "ikeados" donde la funcionalidad priva por encima de todo, nuevos edificio que redecoran las señas históricas de la ciudad.
   
     Por el contrario si es digno de valorar y alabar la apuesta seria y decidida de la iniciativa privada por adquirir fincas del casco antiguo para restaurarlas, rehabilitarla para vivienda familiar, respetando escrupulosamente cuantos elementos históricos y artísticos poseen y añadiendo otros que en nada desentonan con el conjunto arquitectónico del edificio, es más, vienen a potenciar su belleza, aportando categoría también a la zona donde se encuentra ubicado.En estos casos, donde antes cabían dos, en el mismo espacio, no caben tres, ahora, en una antigua casa de vecinos donde antes cabían siete familias, entre salas y alcobas, hoy cabe solo una con garaje y almacén en la planta baja y viviendo en la superior, pero todo ello "poniendo en valor", como tanto se estila hoy por los políticos, cada uno de estos singulares edificios.
   
      Nuestros histórico casco histórico merece mayor protección y respeto, solo hay que poner de ejemplo al de Cáceres para darse cuenta que no todo se puede "ikear".
 
      (Artículo publicado en Información Jerez el pasado sábado 12 de febrero de 2011)

Evocador aspecto de la calle de la Carne antes de los derribos acometidos en los últimos años. 
     
   

martes, 15 de febrero de 2011

LOS DUEÑOS DE LA PORVERA

    
      DEDICADO A LOS COFRADES DE LA VIRGEN DE LA SOLEDAD, REINA DE LA PORVERA

     El plan de movilidad de Jerez hace honor a su nombre. Para acceder al centro de la ciudad, y si tienes que ir con el coche primero hay que confeccionarse un plan de tráfico y después echarle gasolina, porque las vueltas y los movimientos del vehículo intentando llegar a un lugar concreto es inevitable.

     La nueva medida afecta a la céntrica calle Porvera, la que en tiempos fuera camino que circundaba la muralla medieval, una de las primeras calles del Jerez extramuros, la de Por-vera de la muralla,  en vez de por el lado de la muralla, la calle del viejo convento Mínimo después escuela de Arte y de Empresariales, de la primera casa lasaliana y marianista, la de las grandes mansiones de Pemartín, frente a Cristina; de Abrantes, esquina con Escuelas, con su portada dieciochesca y  sus muebles con portafotos reales; de Angulo y Dávila posteriormente del matrimonio García-Pelayo-Guerrero , hoy pidiendo urgente restauración; de los Mateos o la que fuera  del Marqués de Casa Arizón, que en tiempos dio nombre a la calle.

     La calle de las dos Encarnas, la Viuda de González de la Peña y de la Viuda de Ruiz-Mateos, aquella dama rondeña de enternecedora estampa. La calle donde naciera el ilustre marino Javier de Salas y Rodríguez-Morzo y donde viviera el renombrado Arquitecto Hernández-Rubio. La calle de las sombras parisinas, de la Casa Petra, reliquia de los viejos tabancos cátedra de la Universidad de la calle; de los periódicos de Castro, del museo de las antiguas máquinas de escribir, de los montaditos buenos, de los olores a tortillas, de las figuritas de Belén, de las persianas de esterillas, de la farmacia que me recuerda a aquella mujer graciosa y ocurrente esposa de Manuel Alonso Cortiguera, que tan buenos momentos nos hacía pasar a toda mi familia en las veraneos del Puerto. La calle de escaparates con grandes onzas de chocolate bajo la torre albarrana, de las impresionantes inundaciones con melones flotando y de las celebraciones en la Cepa de Oro.. La calle de las carretas que miran a las marismas de Doñana bajo un palio morado de jacarandas y la calle de la Soledad, la Soledad de la Porvera, la que en su recogida, con su candelería encendida da nobleza a sus fachadas, al verde de sus árboles y hasta a la luna que se asoma entre las ramas, la de la Virgen que con su sola presencia no necesita más historia para dar empaque a la calle que va junto a la muralla.
   
     Pues en este marco de lujo vienen nuestros munícipes y colocan, en todo el centro de la antigua calzada donde antaño llegaban las sombras de las almenas del Jerez amurallado , una barrera en tonos azules para delimitar las dos direcciones, una barrera mas propia de una pista de coches de choque, que de la nobleza de esta via que un día perdió la vista de sus viejas murallas. Porque ya no se podrá aparcar, porque la Porvera es ahora de ida y vuelta, porque la movilidad obliga a moverse, a no parase en este paseo que ha fabricado el paso del tiempo, ha surgido la polémica, porque hay aún quien piensa que las calles con historia no son para recrearse en ellas sino para llegar antes y más cómodamente a otros sitios.  Para pararse el menos tiempo posible y no estorbar, para descargar y cargar, para comprar y quitarse de enmedio, para llegar hasta la misma puerta sin tener que recorrer ni un solo tramo de ella, para seguir viviendo en esta sociedad de la falta de tiempo, de las prisas y de las comodidades.
     
     Los restos de las murallas que se asoman tímidamente, entre colores de otras épocas, los morados de las jacarandas que aguardan sin prisas florecer cada primavera, los sillares de las nobles fachadas que aguantan lluvias y tempestades, los sonidos de la algarabía infantil de las escuelas de ayer y de hoy, los tradicionales carros iniciando, año tras año, un nuevo camino hacia el Rocío y los portentos de las manos de la Soledad agarradas a su sempiterno clavo de los martirios no necesitan carril bus, ni aparcamientos, ni prisas, ni polémica alguna. Recreemonos en su calma y aprendamos de ellos que son, porque asi lo ha  forjado el paso del tiempo, los auténticos dueños de la Porvera.
     
      (Artículo publicado en Información Jerez el 10 de enero de 2009. Aquellas medidas para agilizar el tráfico de la Porvera fracasaron y dos años después esta emblemática calle jerezana sigue siendo un caos circulatorio donde predominan los coches aparcados en doble fila. Precisamente hoy se ha dado a conocer que el aparcar en doble fila es la infracción más frecuente en España)

Imagen de otros tiempos de la calle Porvera cuando aún no estaba inundada de vehículos 

     

lunes, 14 de febrero de 2011

SANTOS PATRONOS

     

    EN EL DÍA DE SAN VALENTÍN

     Existen Santos Patronos para todos los gustos, San Antón para los animales, Santa Apolonia para los dentistas, San Gregorio Magno para los cantantes, San José de Arimatea para los funerarios, San Gabriel para los mensajeros y operarios de televisión, el Buen Ladrón para los presos. etc. En Jerez tuvimos un Santo Patrón para cada gremio, San Telmo para los barqueros, San Pedro para los canteros, por aquello de "tu eres piedra y sobre esta piedra edificaré mi iglesia", San Bartolomé para el gremio de curtidores de piel, San José para los carpinteros, etc. la mayoría de estos patronazgos han quedado en el olvido porque lo que verdaderamente interesa en la actualidad es lo comercial y uno de los Santos Patronos mas rentable económicamente es, el que celebramos hoy, San Valentín, el Patrón de los enamorados. Un santo que hay quien dice incluso que no existió sino que forma parte de la leyenda, de esas historias que interesan mantener aunque no se puedan demostrar.
   
      Cuentan que San Valentín fue un médico romano que se hizo sacerdote y que casaba a los soldados, a pesar de que ello estaba prohibido por el emperador Claudio "El Gótico" que lo consideraba incompatible con la carrera de armas. El emperador ordenó decapitarlo en el 270, un 14 de febrero, dando origen a esta fiesta. La festividad fue borrada del calendario eclesiástico en el año 1969 como parte de un intento para eliminar santos de origen posiblemente legendario. Existen otros San Valentín pero estos nada tienen que ver con los enamoramientos. La fiesta de San Valentín carece de carácter religioso, es puramente comercial, seis de cada diez personas así lo consideran.
     
      Una encuesta realizada por una empresa relacionada con las ofertas de viaje por Internet, revela que un 85 por ciento de los encuestados tiene intención de regalar algo a su pareja aprovechando la fiesta de San Valentín. Probablemnte pocos de estos enamorados estarán dispuestos a gastarse 38.600 euros que cuesta una romántica cena de lujo y una noche de amor (con dos relojes Cartier de regalo) en la suite presidencial de uno de los hoteles de lujo de Shanghai que este año compite por ofrecer la cena de San Valentín mas cara y lujosa posible.
    
     Me parece que, de aquí de Jerez, van a ir pocos hoy a Shanghai, como mucho a un restaurante chino a pedir el menú del día con sus rollitos de primavera y su arroz a las tres delicias porque el índice de paro, unido a la crisis y a las pocas perspectivas de empleo no da para mucho más, y si no que se lo pregunten a los párrocos de Jerez que, entre el desempleo y la imposibilidad de acceder a una hipoteca se están quedando sin bodas o al bordador Ildefonso que ha visto como ha disminuido, en gran medida, la confección de túnicas para la próxima Semana Santa. 
  
      Tendremos de nuevo que invocar a los Santos Patronos para salir de este bache y ahora que estamos en época de carnaval habría que recordar aquello de "el patrón de los paraos es San Felipe, San Felipe González", ahora tenemos mas suerte porque Felipe González no estaba incluido en el santoral ni tenía poder intercesor, pero San Martín de Porres si y San Martín si es Santo Patrón, ampara e intercede por todos los "zapateros" del mundo.  Y el ser zapatero  es algo bastante complicado porque hay que poner empeño y habilidad en arreglar, lo que por estar tan gastado y deformado, en la mayoría de los casos ya no tiene arreglo.

     Aprovechemos el día de San Valentín que tampoco hay que ir a Shanghai para pasárselo bien y dejemos a los políticos con sus problemas porque ya lo dice el refrán: Donde hay patrón no manda marinero.  
  
      (Artículo publicado en Información Jerez el 14 de febrero de 2009, día de los enamorados)

Barriada San Valentín en Jerez

     
   

domingo, 13 de febrero de 2011

LOS RÍOS NO SON CEMENTERIOS

    
      Hace trescientos años, concretamente en 1709, el ciudadano Juan García, conocido por "Juan el de las brevas" o "Juan Breva", es ahorcado por haber dado muerte a su mujer con esta fruta envenenada. Para conducirlo al suplicio lo introducen en un serón y lo atan a la cola de un caballo. Después de ahorcado lo meten en un barril, en el cual es transportado al río Guadalete y arrojado a él. Allí lo recogería la Hermandad de la Santa Caridad, radicada en varias poblaciones de la provincia de Cádiz´y que en Jerez tenía un hospital concretamente en el edificio de la calle Consistorio donde hoy se encuentra el Ayuntamiento.
    
     La historia de los ríos, desgraciadamente, han ido unida a acontecimiento lúgubres y oscuros, relacionados con crímenes y desapariciones, sus orillas se han convertido en escenarios de desagradables donde la muerte es protagonista.En estos días todas las miradas están puestas en el Guadalquivir, ese rio amplio y hermoso, que nace cerca de Cazorla y vine a morir junto a Doñana y las playas de Sanlucar. El Guadalquivir recibió el cuerpo de Marta, la joven sevillana víctima de la sinrazón humana, de crueldad de unos jóvenes, fruto de unas mentes carente de valores y sin respeto alguno por la vida humana.
   
       El Guadalquivir recibió a Marta a su paso por Sevilla y la sociedad civilizada espera aún poderla encontrar. Marta no es del rio, por mucho que unos desaprensivos y cobardes la hayan arrojado a las aguas como el que tira una colilla apagada. Marta somos todos y por eso no podemos dejar que una parte de nostros, de esta sociedad que lucha día a día por la vida, por la libertad y por el respeto mutuo se unda en las oscuridades del fango de la impotencia. Marta tiene que aparecer, ojalá como el Conde de Montecristo salvado por el destino, después de haberlo dado por muerto y arrojado a las profundidades, pero eso es difícil porque las investigaciones policiales, desgraciadamente, apuntan en otro sentido.
     
      El Guadalquivir como nuestro Guadalete, no son fosas comunes, no son escenarios para luchas ni batallas, ya lo de la Batalla del Guadalete es tan antiguo que casi se no olvida en el tiempo por mucho que supusiera el comienzo de la invasión musulmana en España. Ni el Guadalquivir con sus 657 Km. de longitud y su superficie de 58.003 Km cuadrados, con todo su caudalosa desembocadura, ni el Guadalete con sus 3.430 Km. cuadrados de cuenca tienen capacidad para acoger la grandeza de un ser humano.
      
      Los ríos no son cenmenterios, el cementerio, en todo caso, es el mar, ya lo dijo el poeta "nuestras vidas son los ríos que van a parar a la mar que es el morir". Y porque nuestra vida son los ríos, el Guadalquivir, el mítico Betis, el mayor de los ríos atlánticos de la península Ibérica, el gran río enteramente español, tiene que devolver al mundo lo que no le pertenece.
     
      El Guadalquivir  divaga desde Sevilla a Sanlucar por una amplia llanura fluvial , mal definida, a menudo pantanosa, y describe en ella grandes y movedizos meandros, desembocando en Sanlucar, tras salvar la difícil barra de Bonanza. Es la misma travesía que realizan tantos turistas desde Sevilla, la misma travesía que puede haber realizado Marta del Castillo, la misma travesía que vienen rastreando las fuerzas de seguridad del Estado, la misma travesía que viene haciendo este rio desde tiempo inmemorial no para servir de cementerio sino para llenar de naturaleza viva sus orillas, no para un valle de lágrimas sino para llenar de vida su propio valle, el valle del Guadalquivir. Por eso Marta no es del río y Marta es de todos y tenemos que encontarla.
     
        (Artículo publicado en Información Jerez el 27 de febrero de 2009. Dos años después de aquel lamentable suceso, con motivo de celebrarse el juicio contra los presuntos asesinos, la policía ha vuelto a iniciar las labores de búsqueda del cuerpo de Marta del Castillo)

Perspectiva histórica del río Guadalete en su desembocadura junto a la playa de la Puntilla en El Puerto de Santa María


sábado, 12 de febrero de 2011

LA CASA DEL CRISTO

  
 DEDICADO A LOS AMIGOS DE "JEREZ, PATRIMONIO DESTRUIDO" EN CUYA ÚLTIMA ENTRADA DE SU  BLOG SE HACE REFERENCIA A  LA ALTERACIÓN QUE ESTÁ SUFRIENDO ESTE EDIFICIO.

   El asunto de la ermita de Guia ha traído a la actualidad la preocupación por el patrimonio jerezano, aunque como siempre suele ocurrir en esta ciudad cuando se pretende hacer justicia con algo nuestro llegamos  tarde, recordemos cuantos homenajes póstumos llenan la historia de la ciudad. Ahora no hay que culpar a la empresa constructora sino a quien permitió o a quienes aprobaron tamaño atropello en aquel entorno histórico artístico de nuestra ciudad.
   
   A raiz de la polémica surgida sobre este tema ha salido, también, a colación una actuación que se viene realizando en la histórica casa del Cristo en la calle del Pollo número 6.  Un edificio del siglo XVII que se encontraba completamente abandonado y que en tiempos fue Hospital de Mujeres Incurables.
   
     Este Hospital fue fundado, en el siglo XVIII, concretamente en 1734, por el sacerdote D. Ramón Álvarez de Palma, ayudado por una terciaria franciscana, un inquieto y prestigioso párroco de San Miguel que, entre otras fundaciones se le debe la creación del primitivo templo de San Pedro como iglesia auxiliar de la parroquia del Arcángel, adquiriendo posteriormente una prebenda en la Catedral de Sevilla y ocupando el cargo de secretario del Cardenal Solís. Según nos cuenta el historiador Agustín Muñoz el Cristo que estaba en el zaguán se quitó en 1890, pero a principios del siglo XX aún se conservaba en la escalera de la casa un cuadro de los tiempos de la fundación hospitalaria. En 1753 el Hospital se traslada a la calle Vicario, donde antiguamente existía una pequeña capilla dedicada al Cristo de los Desagravios y que ,con motivo de este traslado, se inicia la construcción de un espléndido edificio neoclásico con capilla que aún se mantiene en activo pero con otros fines. En este nuevo edificio estuvo el Hospital de Mujeres Incurables o contagiosas hasta 1840. 
   
    El que hoy pase por la calle del Pollo puede contemplar muy deteriorada, entre los restos que han quedado en pie tras el parcial derribo de esta casa, una cruz enmarcada por una moldura antigua, que esperamos se conserve como testigo de la importancia que tuvo este edificio en la antigüedad. Afortunadamente se han respetado las partes más nobles del edificio, la portada barroca con sus pilastras almohadilladas y su escudo blasonado, el sencillo patio de entrada y el elegante patio interior con arcos de medio punto sobre columnas.
   
    Una nueva promoción de viviendas se van a levantar en esta casa del Cristo, donde un día un venerable sacerdote instalara un hospital para aquellas mujeres desechadas por la medicina, por la sociedad e incluso por los hospitales, donde tantas historias arrastrarían cada una de estas enfermas, donde se ubicara un Cristo, a su entrada, que tanta fama le diera no solo a la casa sino también a toda la calle, donde durante años sirviera para viviendas populares de unos vecinos de San Miguel, santo y seña de la ciudad, y que, como tantas cosas, con el tiempo quedó abandonada a su suerte. Esperemos que su reconstrucción no desmerezca en nada a sus orígenes, a la idiosincrasia del barrio donde se enclava, a la monumentalidad de Jerez y al respeto que merece todo referente histórico de una ciudad.
   
     En el tema de la ermita de Guia parece ser que se ha llegado tarde, que solo un acuerdo con la empresa constructora que permita la permuta de terrenos puede hacer posible que aquel paisaje mantenga la fisonomía de hace siglos. Lo verdaderamente importante ahora es que esa preocupación por el patrimonio no se pierda, que las nuevas actuaciones que se realicen, tales como el palacio de Riquelme o la capilla de la Jura de San Juan de los Caballeros, por menionar solo a las más urgentes por su deterioro y abandono, no vuelvan a ocasionar polémicas, porque será señal inequivoca de que las autoridades pertinentes, desde el primer momento han sabido recoger el sentimiento mayoritario de la población.
   
   Es necesario, por tanto, tal como mencionó el presidente de la Academia de San Dionisio el pasado martes, que se cuente con las instituciones de la ciudad y con la voz de los ciudadanos antes de autorizar nada que afecte a la historia monumental y artística de Jerez. Solo así se evitará lo ocurrido en el entorno de la Ermita de Guia y lo que esperemos no ocurra con la histórica casa del Cristo.
   
    (Artículo publicado en Información Jerez el 16 de febrero de 2008. Tres años después las obras están muy avanzadas y desconocemos el paradero de aquella cruz)

La casa del Cristo  en la calle Pollo antes de las obras que se están realizando en toda la finca y que han venido a alterar su fachada y todo el edificio.