miércoles, 11 de mayo de 2011

UNA SEMANA EN EL PARQUE


Una vez al año y durante toda una semana, nuestro parque González Hontoria, recobra su antiguo esplendor y todo ello gracias a que en su recinto se celebra la Feria del Caballo. Mucho de la grandeza de nuestra feria se lo debe al marco en el que se encuadra, no todas las ciudades tienen el privilegio de tener una feria en un parque, ni en todos los parques se pueden celebrar una feria con la grandeza y la categoría de la de Jerez.
No hay que olvidar que Jerez tiene un parque donde se celebra una feria y no una feria que cuenta con un parque, la feria es una semana y el parque todo el año, por eso es triste comprobar cómo en estos días se le presta toda la atención del mundo al González Hontoria y se nos llena la boca hablando de las bellezas que encierra y luego, el próximo lunes, nos llegue la triste realidad, porque el parque vuelve a ser un lugar olvidado y sin más interés hasta que llegue una nueva feria. Nuestro parque, que hace unos años recobró su belleza tras el derribo de casetas fijas, no merece ser ignorado.
Aún permanece en la mente de muchos jerezanos, tiempos en los que el parque González Hontoria era un auténtico recreo que invitaba al paseo y a la convivencia, con unos jardines de la Rosaleda llenos de flores, de arcos de pinos, con estatuas alegóricas de las estaciones del año, con sus paseos concurridos, entre cochecitos para niños y padres tomándose los aperitivos en el bar de Benjamín, con su aspecto romántico y su fuente que ofrecía un frescor delicioso ante el busto de don Julio, el alcalde jerezano que había nacido en Sanlúcar, el alcalde de las grandes obras, el alcalde que acondicionó este parque para que fuera lugar de esparcimiento de sus conveclnos.
El González Hontoria es para los jerezanos, lo que el Retiro supone para los madrileños, el parque María Luisa para los sevillanos o el parque Genovés para la gente de Cádiz, es el pulmón histórico de la ciudad, por muchos otros parques que se creen con mayores dimensiones o modernas prestaciones.
Los parques históricos están unidos a la vida de los ciudadanos, en ellos se han desarrollados muchos momentos entrañables que quedan marcados para siempre, pasear por ellos es un revivir los recuerdos y un estímulo para los sentidos, por ello es necesario que nuestro parque González Hontoria recobre esa belleza y esa actividad de antaño, que se busquen fórmulas para reavivarlo no sólo cada semana de feria o en la fiesta di San Antón, sino todo el año; para que sus jardines vuelvan a tener el cuido y la belleza de antes, para que sus paseos se vean concurridos al igual que vemos otras zonas verdes de la ciudad, se dote de vigilancia adecuada para garantizar una mejor conservación y se construyan unas portadas dignas de un parque con la historia y categoría de nuestro González Hontoria.
Éste no es el parque de la feria es el parque de siempre, el parque de los grandes eventos y, también, el de las pequeñas vivencias, un parque que debe de servir, en el año, para algo más que hacer deporte o para los encuentros amorosos.
Nuestro González Hontoria, que en estos días se llena de gloria, de caballos prodigiosos herederos de aquellos monjes del Guadalete; de jerezanos elegantes porque las gentes de aquí saben que ésta es una fiesta grande como para ir de cualquier forma, de casetas llenas de arte porque como dice mi buen amigo Lete:"Una caseta no se hace con dos tablas y un bote de pintura"; de flamenco con clase, sevillanas o bulerías, no de discotequeo impropio; de vinos de calidad porque por algo las minas del oro líquido se encuentran en nuestros campos; una feria que durante una semana se hace dueña de un parque porque el parque quiere hacerse feria, porque es irresistible no dejarse llevar por el embrujo de una fiesta tan inigualable y porque aunque sólo sirviera para una semana nuestro parque ya sería mucho parque. Hacer del parque una feria y, después de la feria un parque tiene la misma importancia, no se trata, después, de olvidarse de él y "azé un corrá" como nos dice la canción de moda, porque el parque sigue vivo como sus árboles centenarios.
(Artículo publicado en Información Jerez el 13 de mayo de 2006)

Imagen del ayer de un frondoso parque González Hontoria


Un día en el parque González Hontoria, correspondiente a los primeros años de la década de los sesenta del pasado siglo, cuando este parque jerezano era un lugar habitual de paseos y juegos infantiles.


No hay comentarios:

Publicar un comentario