sábado, 10 de septiembre de 2011

CASCO HISTÓRICO


             Una de las asignaturas pendientes que debe afrontar el nuevo gobierno municipal es, sin lugar a dudas, la recuperación del casco histórico jerezano. La situación en la que se encuentra el casco antiguo de la ciudad es verdaderamente alarmante, la ruina, la dejadez y el abandono es la nota dominante de todo un entramado de calles que, por su antigüedad, trazado y tipismo, podría ser, si, de una vez por todas, se tomara cartas en el asunto, uno de los grandes reclamos turísticos de Jerez.
              Si preocupante es la situación en que se encuentra las distintas calles y plazas que forman el casco histórico, es la calle Juana de Dios Lacoste la que se lleva la palma de la desidia y el deterioro. Sus vecinos no aguantan más y en esta pasada semana han elevado su pública protesta por lo que consideran no solo un desinterés por nuestra propia historia sino, también, un peligro por la situación en la que se encuentran la mayoría de las fincas que conforman esta antigua vía, más conocida como la Carpintería Alta.

               Desde la plaza Orbaneja, donde desapareció, hace poco tiempo, la conocida como casa de esta ilustre familia, con su deteriorada fachada con blasón incluido; hasta su confluencia con la Carpintería Baja y la calle Carmen, toda una serie de fachadas, la mayoría del siglo XVIII, se nos presentan como claro ejemplo del deterioro y el abandono, solares donde antes existió históricos hornos, portadas barrocas que se mantienen en pie de milagro, rejas que nos muestran en su interior todo un basurero, foco de infección e inmundicias, antiguas bodegas que se caen a pedazos, repletas de maleza y escombros; ratas, insectos y malos olores que se adueñan de la calle y que la hace intransitable en horas nocturnas. Y todo ello cuando en la misma calle se encuentran edificios tan singulares como el colegio del Salvador y su balcón de los Ponce de León, el convento de Agustinas Ermitañas de Santa María de Gracia, popularmente conocido como de Santa Rita, la residencia de las Hermanas de la Cruz, la espalda del antiguo Cine Astoria o el monumento que Jerez levantó a Santa Ángela de la Cruz en la coqueta plazoleta que se sitúa a la mediación de la calle, e incluso otras casas de cierta antigüedad y belleza que valientes vecinos han restaurado y embellecido, apostando por la recuperación de tan histórico barrio.
                
             La calle Juana de Dios Lacoste, rotulada en homenaje a tan benefactora dama jerezana, tiene un apellido pijo pero un aspecto excesivamente pobre, tiene un trazado morisco y sinuoso de gran belleza y atractivo para el turismo, tiene todo lo necesario para ser una de las calles más interesantes de la historia local, pero para ello hace falta, con urgencia, que las autoridades tomen conciencia de que su actual situación es insostenible, que no se puede dejar pasar más el tiempo sin tomar carta en el asunto y que se le dé una respuesta a estos vecinos que ven, como, por momentos, se está llegando a una situación muy grave tanto para los que allí habitan como para los que transitan por ella.

            Aún estamos a tiempo de recuperar la prestancia y dignidad de una calle que en tiempo fue una de las principales vías del Jerez intramuros, una calle que no puede seguir más con su aspecto actual más parecido a Sarajevo o a cualquier ciudad del tercer mundo.

            El casco histórico de Jerez, es un diamante en bruto que hay que pulir, un potencial tremendo, completamente abandonado a su suerte, que ya es hora de que se quite ese otro casco que parece tener puesto desde hace ya demasiado tiempo, entre tanta obra, puntales y derrumbes, para acometer cuantas actuaciones son necesarias con el fin de devolverle el esplendor y atractivo que nunca debió perder. 
           
             (Artículo publicado en Información Jerez el pasado 27 de agosto de 2011)
Fotografía de otros tiempos de la plaza de Orbaneja con la casa de esta ilustre familia jerezana a la derecha. Sobre la ventana de la planta baja podemos ver, timidamente, casi cubierto por la cal, el blasón y la moldura mixtilínea que la enmarca.


La misma casa de los Orbanejas hace pocos años cuando su estado de deterioro era ya evidente. La casa recientemente ha sido derribada y desmontada su portada de piedra, en su lugar queda un amplio solar.

La calle Santa María de Gracia, entre las plazas de Orbaneja y Ponce de León, que enlaza con la calle Juana de Dios Lacoste, aún mantiene su sabor de antaño aunque algunos edificios de moderna construcción han venido a alterar esta estampa del ayer que vemos aquí con carromato incluido

Ejemplar y caritativa dama Dª Juana de Dios Lacoste que da nombre a una parte de la antigua calle Carpintería Alta en el casco histórico jerezano. Calle a la que se hace referencia en este artículo y que actualmente se encuentra en lamentable estado. (Fotografía tomada del libro Jerezanos para la historia de Antonio Mariscal)
       

1 comentario:

  1. LLEVO MAS DE 30 AÑOS ESCUCHANDO ESLOGAN DE LOS PARTIDOS POLITICOS.
    -EL CENTRO DE JEREZ LATE CON FUERZA.
    -JEREZ LA CIUDAD QUE VIENE Y TANTOS OTROS.
    BLA,BLA,BLA
    DESDE LA TRANCISION HASTA HOY HA HABIDO MAS QUE TIEMPO SUFICIENTE PARA HACER DEL JEREZ HISTORICO Y SOBRE TODO DEL JEREZ INTRAMUROS UN REFERENTE TURISTICO DE PRIMER ORDEN.
    EL OTRO DIA PASEANDO CERCA DE LA CATEDRAL SENTI VERGUENZA CUANDO UNOS TURISTAS ME PREGUNTARON POR LA CASA ANEXA AL CAMPANARIO "LA CASA DEL CURA".
    COMENTARIO: ESTA QUE SE CAE Y A CONTINUACION,VEAMOS LA CATEDRAL Y NOS VAMOS AL PUERTO.
    HACIA DENTRO DEL JEREZ INTRAMUROS DA PENA,ASCO Y SEGUN LA HORA MIEDO.

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